Saint-Jean-Cap-Ferrat es una joya de la Riviera Francesa, pues consiste en un resort costero ubicado en una península boscosa que se une con el mar Mediterráneo. Durante varias décadas, este paraíso tranquilo ha sido un destino de vacaciones muy popular entre los ricos y famosos. Observa los yates de lujo que entran y salen del puerto, frente a las grandiosas villas antiguas, mientras disfrutas el ritmo de vida tranquilo en las terrazas de los restaurantes y las cafeterías.
El sur de Francia es una zona famosa por sus playas excepcionales, y las bellas franjas de arena de Saint-Jean-Cap-Ferrat son una muestra de esta belleza. Aprovecha al máximo los veranos calurosos en este resort del Mediterráneo al pasar la tarde en la playa del Puerto. Esta es la playa más grande de la península.
Si quieres un sitio más íntimo, renta un camastro en la encantadora Playa Passable. Está en una pequeña caleta rodeada de árboles. Disfruta una buena comida en un restaurante con vista al agua clara. Dirígete a la Playa Paloma, donde puedes rentar equipo para practicar varios deportes acuáticos, como ski acuático, paseos en la banana y paseos en moto acuática. Dirígete a la punta sur de la península para disfrutar la vista magnífica del Faro de Cap Ferrat, que mide 34 metros (112 ft) de altura.
Otro de los edificios emblemáticos de la región es la Villa Ephrussi, una residencia majestuosa ubicada sobre una colina, que perteneció a la baronesa Ephrussi de Rothschild. Observa la enorme colección de arte, que incluye pinturas del siglo XVIII, muebles antiguos y tapices flamencos. Pasea por los jardines bien cuidados y disfruta la vista del mar.
Si quieres estirar las piernas, disfruta un paseo por el sendero de la costa. Regresa al pueblo para relajarte en las cafeterías y los restaurantes de la zona. Prueba las especialidades de la región, como los filetes de lubina y el salmón con trufas.
Para llegar a Saint-Jean-Cap-Ferrat, toma un vuelo hacia el Aeropuerto de Niza-Costa Azul y renta un auto para hacer el viaje de 30 minutos hacia el este. Si quieres explorar un poco más la Riviera Francesa, es mejor rentar un auto. Mónaco está a solo 15.7 kilómetros (9.8 mi) de aquí, mientras que las playas y las iglesias antiguas de Villefranche-sur-Mer están a unos 10 minutos de viaje en auto.